Este poema representa el sentimiento de soledad que me inundó hasta que por fin «escuché», para dar paso al amor.
Aquí dije adiós para siempre a la soledad interior, ya no me hacía falta, pues cuando el auténtico amor (interior) viene, te llena por completo.
Ay soledad, fiel compañera
que me acompañas en mi vida
que no me dejas nunca
y siempre me cuida
Ay soledad, gracias por estar ahí
contigo siempre he podido contar
pero ahora otras sensaciones
necesito experimentar
Ay soledad, cuantas cosas te he contado
gracias de nuevo por estar siempre a mi lado
Pero necesito a otra “gente” conocer
y seguir mi camino y poder aprender
Ay soledad, déjame crecer
gracias por no dejarme perder la fe
cuando estaba solo y deprimido
supiste animarme y estar conmigo
Ay soledad, aunque ahora te vayas
y haya conocido al Amor
quédate siempre cerca
pues haces bien a mi corazón
Ay soledad, por qué no te llevas bien con el Amor
los dos sois necesarios para mi corazón
Ay soledad, me despido con un hasta luego
porque para siempre, es demasiado tiempo
Te agradezco esas noches
que me has escuchado llorar
y gracias a ti
me he podido expresar
cuando creía que no podría, entenderme nadie más
te doy gracias de verdad
Ay soledad, cuantas cosas hemos vivido
risas, lloros y pensamientos, hemos compartido
Siempre has estado ahí, junto a mí
y ha habido momentos que gracias a ti
pude seguir
Ay soledad, me despido ya
pero mis pensamientos quería hacerte llegar
Gracias por todo, de verdad
pero ya no te necesito más
el Amor me hace ahora compañía
y es lo que más ansío, en mi vida
Pero quédate cerca por si te llamo
aunque ahora tengo a la “persona” que amo
pero quiero seguir en contacto contigo
porque eres alguien, al que siempre he querido
y considero fiel amigo
Con la voz de Yolanda Adabuhi
