En esta realidad, en el mundo manifestado, todo tiene su opuesto (alto-bajo, rico-pobre, etc), pero somos mucho más que una forma. La mayoría de la gente se identifica con una forma, con esta vida, olvidando lo que es en realidad.
Al identificarse con la forma, experimenta desde la forma, pequeños placeres momentáneos pero siempre con su opuesto. Tranquilidad-nerviosismo, amor-odio, etc., pero cuando uno no se identifica con la forma, con lo que parece real desde la perspectiva de la mente, de lo que no se es, paulatinamente irá percibiendo desde más allá de la mente, irá sintiendo y percibiendo desde lo que realmente se es, sin opuesto.
Cuando se percibe desde lo que realmente se es, no hay opuesto, las cosas son lo que son, sin catalogaciones de ningún tipo, vives con aceptación y ves más allá de las formas, no juzgas a las formas, no juzgas a la gente, aceptas.
Quien sigue juzgando, quienes siguen identificándose con la forma, con lo manifestado, han de seguir viviendo y experimentando lo que no son, pero ese aún es su camino, para comprender y hacer comprender que ellos no son la forma y lo que eso conlleva, vanidad, odio, rencor, etc., sensaciones de baja vibración que alejan de lo que realmente se es, pero que de momento son necesarias.
Son necesarias porque aún la mayoría de la población mundial se identifica con el sufrimiento que experimenta la mente, con la forma, con lo físico y que a sus ojos parece real, aunque realmente sea producto de la mente.
Aunque no se pueda comprender desde la mente, lo que la mayoría aún intenta al identificarse con ella, es que hay que experimentar lo que no se es, esas corazas que la gente se pone, como el miedo, odio, ira, vanidad, etc., y aunque alejan de lo que realmente se es, hay que tener presente que para aquellos que viven con ellas todavía es necesario.
Eso es la aceptación de los demás, el camino del Amor y la Comprensión, pues ya no juzgas a nadie, comprendiendo que están actuando desde la inconsciencia y que realmente ellos no son los que actúan.
Como Jesús dijo: “Perdónales, porque no saben lo que hacen”. Aunque mentalmente se crean con la claridad de elegir para actuar, están influenciados por las corazas, por el miedo, por la inconsciencia, así que no son ellos los que actúan, no saben realmente lo que hacen. Pero ten presente que Tú, Aquí y Ahora, en esencia eres TODO, UNO con todo y todos.
Entonces no tiene sentido juzgar a nadie, ya que tan solo estarías juzgando a la forma, y uno no es la forma.
El mundo físico tan sólo es un reflejo de la mente, y como a un nivel generalizado en las mentes de la gente está el miedo, odio a lo diferente y desconocido, vanidades, etc., en el mundo se refleja.
Por eso, en el caso de que el mundo físico pudiera cambiar (aunque llegado un momento en el que percibes más allá de la mente no te es necesario, todo es perfecto y está como ha de estar), se ha de empezar por uno mismo.
Conectar con lo que se es en esencia, trascendiendo lo que no se es y así percibiendo y actuando desde lo que se es. Comprendiendo que todos somos uno, y que no tiene sentido creerse mejor o peor que nadie, con paciencia y sin ninguna intención de aprovecharse de nadie. Con Amor hacía todos, ya que somos lo mismo, y odiar a alguien es odiarse a sí mismo y alejarse de lo que realmente se es.
Todo está como ha de estar, no te impacientes. No desees convertirte o ser alguien diferente, sé quién realmente eres. Algo tan bello que no se puede explicar ni hacer entender, eres importante.
No les odies por lo que hacen, ámales por quienes Son
Nota: Este artículo fue escrito cuando Nunc se retiró del mundo y comenzó a transmitir su experiencia. Es posible que algunas formas de expresión ahora no fuesen las mismas. Ve hacia lo que apunta, más allá de los conceptos. Te toca discernir.
Con la voz de Yolanda Adabuhi
